El autor de la masacre de la Rambla, huyo del lugar del terror que había causado. Se dictó una orden de busca y captura, no de vivo o muerto, por lo que me da a entender que una vez descubierto donde se encontraba, no sabemos si se le conminó a entregarse y mirar de detenerlo con vida, cosa que hubiéramos podido obtener más información de esta célula terrorista.
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No creo que por gritar que "Alá es grande", se tenga que abatir a ningún ser humano, por muy terrorista que sea cuando se le tiene acorralado. Ya serán los jueces quien lo sentencie.