Un 'déjà vu'. Eso es lo que estamos viviendo. Parece que con el cambio de hora hayamos retrocedido también a una situación parecida a la del 14 de marzo. Ya preveíamos que esto podía pasar, pero creo que nadie estaba mentalmente preparado. La verdad es que a estas alturas ya no hay que buscar culpables, pues los culpables somos todos.
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Ya estamos cansados de ver a los políticos echándose en cara sus errores unos a otros, y tampoco es cuestión de que los ciudadanos tratemos de rehuir nuestra responsabilidad. La mezcla entre decisiones mal tomadas por parte del Gobierno y ciudadanos tomándonos las normas a nuestro aire ha hecho que hoy nos encontremos en esta situación. Pero debemos seguir luchando, porque la pandemia no ha acabado y estamos juntos en esto. Así que si el mes de marzo fue un precedente, intentemos remontar esto ahora para poder salir pronto a la calle con normalidad.