Y todo esto ¿para qué?, me pregunto

Para continuar con un monopolio que dura... desde que tengo uso de razón.

Los tiempos cambian y la sociedad evoluciona, no verlo es estar ciego y sordo. ¿Cuántos jóvenes vemos levantar la mano y coger un  taxi? ¿Aquellos a los que el trayecto se lo paga la empresa o su familia? ¿Realmente nos imaginamos que las nuevas generaciones van a continuar utilizando el servicio del taxi tal y como lo conocemos? No vivimos en este mundo.

Los taxistas deberían sentarse a negociar y a negociar un acuerdo que les pueda resultar satisfactorio pero pensando en el medio y largo plazo, pensando en cómo va a evolucionar el transporte de viajeros e intentar sentar unas bases para los próximos años que no pase por la huelga, la manifestación y la confrontación.   

Lo contrario, será un terrible desgaste, que no les conducirá a ninguna parte, y a todos nosotros, en general, tampoco,  porque el futuro requiere de otra letra y otra música. Ni siquiera Cabify o Uber formarán parte de ese futuro y cuánto antes nos adaptemos a la sociedad y a su evolución y nos anticipemos a los cambios, más preparados nos encontrará ese futuro que camina irremediablemente hacia otro lugar diferente al que conocemos.