No hay que ser demasiado malpensado, sabiendo lo que mueve a las economías, si digo que la apuesta por enseñar el manejo de la inteligencia artificial en la FP no va orientada al interés de los alumnos tanto como a servir a los intereses del sistema productivo, cada vez más mecanizado e independiente de las aspiraciones del individuo.
Entretodos
En el caso de los resultados obtenidos por los niños de Finlandia, estoy un poco harto de los indicadores, que lo que indican, eso sí, es homologación de los alumnos, como si estos fueran equiparables y su deseo íntimo ser evaluados sin atender a su particularidad ni a sus tiempos de maduración.
La sabiduría del maestro para educar, o extraer (del latín 'ex-ducere') lo que sus alumnos pueden dar, en este contexto, queda sometida a una cada vez mayor burocracia. Y educar, además, no es lo mismo que implementar (del latín 'imple', llenar) conocimientos o capacidades, que luego pretenden ser medidas siguiendo las últimas tendencias del momento; mostrando con ello, lo 'tontos' que podemos llegar a ser y nuestro previsible destino final si no lo remediamos.
Y eso tendrá que ser individualmente, sin atender a tanta paparrucha.