Me propuse no perderme la entrevista que realizaba Ana Pastor a Oriol Junqueras en el 'El Objetivo'. Tenía interés por saber cuál era el planteamiento del líder de Esquerra Republicana y vicepresidente del Govern de la Generalitaat sobre los temas que preocupan a los ciudadanos de Catalunya.
Entretodos
Hubo una hora completa de preguntas y repreguntas en las que se cuestionaron muchos de los aspectos de la política catalana que el Govern está llevando a cabo: la no asistencia a la reunión de presidentes autonómicos (perder entonces la oportunidad de asistir a una reunión importantísima para tratar sobre sanidad, educación, fiscalidad...), la aprobación de unos presupuestos que no satisfacen, parece, más que al que los ha elaborado y a su grupo parlamentario, la inconcreción sobre el planteamiento de un futuro referéndum que tiene visos de ser un calco del 9-N, el cansancio infinito de una sociedad a la que se ha metido en un bucle desde el 2010 en una repetición continua de elecciones y consultas, o lo inexplicable que resulta la alianza de un partido que se llama de izquierdas con el partido representante tradicional de la burguesía catalana y con problemas serios de corrupción en su haber.
Después de una hora de entrevista me di cuenta de que, fuese cual fuese la pregunta, la respuesta era siempre la misma: hay un bien superior, el referéndum, y todo lo demás, empobrecimiento de la sociedad, colapso sanitario, demandas en educación, corrupción… quedan supeditados a él. Los catalanes nos vemos obligados a vivir los problemas acuciantes de una sociedad cada vez más desigual y empobrecida sin quejarnos porque desde hace más de un lustro la independencia y sus preliminares se imponen a cualquier otro asunto. Y ahí seguimos.