Se abre de nuevo la temporada de insomnio. Ya estamos hartos de no poder dormir por las noches. Desde que se inauguró el parque de Can Xiringoi y el espacio que queda detrás del CAP de Cotxeres, donde lamentablemente se les ocurrió poner unos bancos perfectos para el 'botellón', los vecinos de los bloques que dan a la calle de Ramon Albó llevamos años sin poder dormir como Dios manda durante las noches de verano: música, raperos recitando a gritos a altas horas de la madrugada, partidos de fútbol, 'skaters' aporreando la plaza con sus tablas, 'botellones', perros ladrando de madrugada con sus dueños hablando a voces a todas horas, etcétera. En fin, todas las actividades que se puedan imaginar y que impiden el normal descanso de los vecinos. Estoy cansado de tener que llamar a la Guardia Urbana noche sí noche también, y de esperar a que se digne aparecer, si es que lo hace. De lo contrario, despídanse del sueño. Alguien debería poner fin al tema cerrando la plaza por las noches o buscando soluciones para que los sufridos vecinos de este lugar podamos volver a dormir de nuevo como personas normales.
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