Finales de 1999, la llegada del nuevo milenio prometía muchas cosas buenas para toda la sociedad; grandes avances en todos los campos tenían que servir para avanzar y vivir en un mundo mejor. Muchas familias esperábamos la llegada de un bebé, ilusionados por ser padres y con el añadido de serlo en unas fechas importantes.

Veinte años después, hemos avanzado en muchos campos positivamente, pero nuestro planeta vive un momento crítico por el maltrato que le hemos dado y nos castiga con catástrofes naturales. Como sociedad hemos ido perdiendo valores y respeto por todo, y ahora vivimos en un mundo más avanzado pero no mejor.

Quiero pensar, que, a pesar de las perspectivas, en cualquier lugar del mundo hay jóvenes como tú, que nacisteis con el cambio del milenio, y que, a pesar de todo, creéis que trabajando duro podremos vivir en un mundo mejor. Jóvenes que, con solo una sonrisa, un abrazo, y a veces solo con vuestra presencia, sois capaces de hacer feliz al prójimo.

Jóvenes que, con vuestros comentarios, sois capaces de hacer razonar a los adultos y dejarnos con cara de admiración. Jóvenes que a veces parece que vais en otra dirección y os esforzáis en no desviaros hacia donde marca la sociedad. Jóvenes a los que necesitamos para que nos ayudéis a los demás a mejorar y a no seguir destrozando lo que tocamos.

Estas líneas están dedicadas a una joven muy especial, y a todos los jóvenes que viven en cualquier lugar del mundo y que como ella nos hacen ver el futuro de otro color. Gracias por exisitir, "el món és molt millor amb tu".