Finalmente los funcionarios de la Generalitat hemos cobrado la última de las tres pagas extraordinarias que nos habían retenido en los años 2012, 13 y 14. A los funcionarios de otras comunidades autónomas les habían descontado el año 2012 y se les devolvió al año siguiente. Los que podemos contarlo estamos contentos. Otros no han tenido esta suerte. Pero hagamos cuentas: después de nueve años la inflación ha subido un 18% a los malos pagadores, la Generalitat nos penaliza con un 20%. Estoy contento de que finalmente me han pagado, pero no tanto cuando no me salen las cuentas.
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