El próximo día 6 de diciembre, festivo, se celebra el Día de la Constitución Española de 1978, aprobada holgadamente por referéndum del pueblo español. Se conmemorará su 45º aniversario de vigencia. Ahora, España triste y lamentable noticia en todo el mundo. Un pintoresco y desconocido diplomático salvadoreño hará de mediador internacional entre las delegaciones del PSOE y Junts fuera de España, en secreto, sin luz y taquígrafos, negociando en la oscura clandestinidad con total opacidad. Asumirá una función bautizada de "verificador internacional". El pretexto: alcanzar una solución política y negociada al conflicto aceptando el relato secesionista. Una inaceptable y sonrojante humillación.
Entretodos
Es inaudito, insólito. Un supuesto experto en guerrillas llamado a guiar a la comunidad española, a espaldas de sus legítimos representantes en el Parlamento español. Una grotesca e insolente afrenta a la soberanía popular. Se ningunea a las Cortes Generales y se pisotea la dignidad y la democracia de España. Me pregunto, ¿Europa va a permitir ese bochorno?