Es una época llena de cambios, de altibajos, de caos, de movimiento... Y no solo al mirar a fuera, sino también al mirar dentro de nosotros mismos. A veces no nos damos cuenta, o simplemente no queremos mirar, pero nuestra sombra está ahí. Nuestra sombra está ahí y es a veces en el desorden donde aparece con más presencia. No viene a asustarnos, no viene a producir más dolor, solo quiere abrazarnos y cogernos de la mano.
Entretodos
Nos puede dar miedo encontrarnos a nosotros mismos, nos puede producir incomodidad encender la luz de ese rincón de nuestro interior que lleva apagado durante mucho tiempo, pero si lo hacemos es muy probable que encontremos un regalo. Un regalo que nos resultará muy útil en momentos bonitos y difíciles.
Son tiempos en los que nos encontramos con nosotros mismos. Tiempos de cambio. De renovación.