Me extraña mucho que casi no se hable de la reforma de la Ley de Educación, siendo el tema fundamental en la formación de nuestros niños y jóvenes, que son los que nos gobernarán en el futuro.
Entretodos
He leído un poco el proyecto de la ministra Celaá y me ha parecido muy ambiguo y que intenta imponer una ideología y unas normas que ignoran la realidad y la evidencia de la diversidad biológica.
Creo que faltan planteamientos pedagógicos que tengan en cuenta todos los ámbitos propios del ser humano: biológico, psicológico y espiritual, a fin de conseguir un desarrollo integral de todas sus facultades que están en potencia.
Esto requiere diálogo, consenso y sin discriminaciones con las Instituciones Nacionales Educativas, con la Iglesia y con los padres, que tienen el derecho, reconocido en la Constitución, de educar a sus hijos en las propias creencias. Los artículos 16 y 27 en su punto 3, hablan del tema.
Espero que se tengan en cuenta estas consideraciones.