Incluso en un barrio tranquilo como Les Corts el ruido del fin de semana dificulta poder conciliar el sueño. Por la noche la gente canta, grita y berrea en la calle cuanto le place. Así pues, no es un problema exclusivo de barrios conflictivos. Ya se sabe, bares e incivismo los hay en todas partes.
Entretodos
Insto al Ayuntamiento de Barcelona a tomar medidas eficaces para que se pueda descansar, algo vital para gozar de una salud y bienestar plenos. Dormir es un derecho, no un lujo.
Por ejemplo -no sé si las siguientes sanciones existen ya-, se podrían poner multas elevadas (aparcar mal es mucho menos grave) o realizar trabajos o servicios para la comunidad para compensar el daño causado. Por cierto, ¿patrulla la Guardia Urbana? ¿Deben cerrar los bares a las doce de la noche, o después?
En resumen, vivir en sociedad requiere límites de respeto y consideración.