En el mundo del fútbol profesional se debe estar produciendo una suerte de competición entre los que apoyan la entrada de la mujer en este coto tan cerrado hasta ahora para ellas, y los que defienden lo contrario.
Entretodos
Parece ser que, tímidamente pero con fuerza, se van imponiendo los que están a favor de la apertura, pues ya tuvimos, el 14 de agosto, a la colegiada francesa Stéphanie Frappart arbitrando, con dos asistentes también mujeres, la Supercopa de la UEFA entre el Liverpool y el Chelsea, partido que se resolvió a los penaltis.
Y ahora también en España, por primera vez se ha designado a una mujer, Guadalupe Porras, en el trío arbitral que ha dirigido el partido Mallorca-Eibar de la primera jornada de la Liga Santander, jugado en Son Moix. Y lo ha hecho cumpliendo perfectamente su tarea.
Una circunstancia que se puede considerar como un hito histórico, como una circunstancia excepcional pero que puede significar un antes y un después en el arbitraje del fútbol español.