Vi una entrevista en un canal de Youtube en la que se hablaba sobre lo que estaba ocurriendo en estos últimos días en Catalunya: quema de contenedores, saqueos y destrozos a comercios y duros enfrentamientos con las fuerzas de seguridad pública. La razón que se exponía en la entrevista era clara: inestabilidad social e incertidumbre económica desde que comenzó la pandemia. Se nos aproxima una crisis sin precedentes, y ante la pregunta de cuándo creía que finalizaría esto, la persona entrevistada respondió: "No sé. Lo que está claro es que todavía no hemos tocado fondo".
Entretodos
El sábado pasado, tras varias jornadas de desmanes, tuvimos que presenciar el ataque a varias furgonetas de la Guardia Urbana en medio de las Ramblas, quemadas mientras gritaban a la Policía: ¡que se quemen!
Se ha comprobado que cuando se desata la violencia en las calles, no hay policía ni medios que puedan contenerla. Esto es inaceptable. La situación se ha vuelto insostenible por la inacción de los dirigentes políticos.
Durante estos tiempos, la violencia ha sido justificada desde las instituciones del Govern convirtiendo a los catalanes en una sociedad triste y sombría. Mucho me temo que no se tomarán cartas en el asunto hasta que no se produzca algún muerto.