Pedro Sánchez dice que hay que regenerar el espacio público expulsando del mismo las difamaciones, los insultos, los bulos y las desinformaciones. Sin embargo, Óscar Puente, Ministro de Transportes de su Gobierno, lanzó estos exabruptos contra el director de un periódico digital: "Matones de la derecha de toda la vida de este país, carcundia, fascismo puro y duro, gente que apesta la tierra..."

Sin embargo, Sánchez, que se ha convertido en un profesional de la mentira después de decir que está en contra de la libertad de difamación, a renglón seguido dijo: “Feijóo dijo textualmente que la mujer de Pedro Sánchez debería quedarse en casa sin trabajar”. Y lo que dijo textualmente Feijóo fue: "Que no le pediría a su mujer que dejara de trabajar. Pero sí le pediría que dejara de firmar contratos con la Administración Pública."

"No le consentiría que tuviera 'sponsors' para hacer su trabajo y que, posteriormente, esos sponsors fueran adjudicatarios de la Administración Pública”. Y esto no fue un lapsus, porque en otra entrevista Pedro Sánchez ratificó el bulo que le lanzó a Feijóo. Lo que le molesta a Pedro Sánchez no son los bulos ni los insultos, lo que le molesta es que le critiquen y por eso se quiere cargar a los periodistas no alineados con su Gobierno. En fin, para mentir hay que tener memoria y ser inteligente, y Pedro Sánchez, ni lo uno ni lo otro...