Turismo tras el covid

Paseo estelar por Catalunya

Desde Barcelona hasta el Alt Empordà, pasando por el Vallès, el Solsonès y el Pirineo, los más interesantes destinos para observar el firmamento

Contemplando los cuerpos celestes desde el observatorio astronómico de Albanyà (Alt Empordà). / JUAN CARLOS CASADO

Con la mirada en los astros, el mundo terrenal se difumina en una agradable experiencia de desconexión. Allí donde los elementos del firmamento brillan con más nitidez por la ausencia de contaminación lumínica, el cielo nocturno es un escenario espectacular. Mucho más en ciertas noches del año en las que fenómenos como la lluvia de estrellas nos lo muestran mucho más. Una de las más populares y seguidas por mucha gente es la conocida como Lágrimas de San Lorenzo, o Perseidas, una de las mayores presencias de meteoros en la atmósfera de la Tierra, que dibuja tantísimos trazados velocísimos, el rastro de una intensa luz que nos sorprende en la oscuridad regalándonos la emoción de sentirnos afortunados de verla. Esas noches de mayor actividad de meteoros se concentrarán entre el 11 y el 13 de agosto, aunque cualquier noche despejada se pueden ver estrellas fugaces.