Unas 300 personas, vecinas de La Nova Esquerra de l'Eixample, se han vuelto a manifestar este miércoles en el parque Joan Miró para reclamar que se mantenga la arboleda, cuya tala está prevista por las obras de la línea 8 de los Ferrocarriles de la Generalitat (FGC).
Los manifestantes, que ya han convocado movilizaciones periódicas, han comenzado la protesta en el parque en dirección a la calle de la Diputació vía calle Tarragona, bordeando el centro comercial Las Arenas, hasta llegar a cortar la Gran Via en plena hora punta. De vuelta al parque, han leído un manifiesto.
Los vecinos reclaman, sobre todo, que la infraestructura logística de las obras no obligue a talar buena parte de los árboles que ocupan el parque, uno de los pulmones de vegetación de la zona, y muy frecuentado por personas mayores, niños, deportistas y grupos de vecinos. "Es una de las zonas más contaminadas y con menos espacio verde de Barcelona", afirmaban en el manifiesto. Y recuerdan que los árboles tienen más de 40 años, además de zonas con especies vegetales singulares. Y que las máquinas pueden ocupar otro espacio.
Desde Territori explican que el proyecto existe desde 2014 y que hasta ahora el ayuntamiento no se había quejado.