ENSEÑANZA SUPERIOR

Selectividad a rostro descubierto

La prueba de acceso a la universidad podrá realizarse sin la mascarilla, pero con 1,5 metros de distancia

Los estudiantes del Segrià podran llegar a Lleida siempre y cuando presenten su inscripción al examen

Inicio de las pruebas de selectividad en la Universitat de Barcelona. / FERRAN NADEU

No tendría sentido que fuera de otra manera si se tiene cuenta lo avanzado hasta la fecha sobre el nuevo curso escolar. De acuerdo que hablamos de universidad, pero todo forma parte del puzle educativo. Así que, del mismo modo que en las clases del cole, en esos grupos estables, no será necesaria la mascarilla, tampoco los jóvenes que estos días se enfrentan a la selectividad deberán cubrirse el rostro. Los aspirantes estarán separados, como mínimo, metro y medio; tendrán que evitar el contacto físico, y en caso de tener que levantarse por cualquier eventualidad, entonces sí deberán cubrirse la cara.

La pandemia del coronavirus coincide con la convocatoria con más inscritos de la historia en Catalunya, casi 40.000, lo que supone un incremento del 15% respecto al pasado año. Para tratar de espaciar lo máximo posible la prueba, los 216 tribunales (51 más que en el 2019) estarán distribuidos por 63 municipios (43 más que en la edición anterior), lo que, en opinión del secretario general del Consell Interuniversitari de Catalunya (CIC), Lluís Baulenas, permite "garantizar que los estudiantes se examinen con la máxima tranquilidad y seguridad". Incluidos los de la comarca confinada del Segrià, que con un comprobante de su inscripción en las pruebas de acceso a la universidad (PAU) podrán saltar el cerco y hacerse carne en Lleida para tratar de poner la primera piedra de sus estudios superiores. En cualquier caso, sea cerca del Ebro o en cualquier otro rincón, las cafeterías de los campus estarán cerradas y tampoco está previsto que funcionen las máquinas expendedoras. En cuanto a sus pertenencias, cada estudiante deberá colocar su cosas o delante o detrás del pupitre que se le haya asignado, que será el mismo para todas las pruebas.

Lengua castellana, per començar

Las PAU con más inscritos de la historia se desarrollarán de manera excepcional durante cuatro días en lugar de los tres ordinarios, entre el 7 y el 10 de julio, después de que las universidades catalanas la aplazasen un mes debido a la suspensión de las clases por el covid-19. Este martes, los alumnos se examinarán desde las 9.00 horas de lengua castellana, y a partir de las 12.00, de las materias de ciencias de la tierra y medio ambiente, fundamentos de las artes y matemáticas aplicadas a la ciencias sociales. Por la tarde, a las 15.00 horas empezarán los exámenes de análisis musical, historia del arte y física. Dado que a lo largo del curso cada centro organiza los temarios en función de su proyecto educativo, las pruebas ofrecen más flexibilidad de opciones a los alumnos, para que siempre puedan elegir entre los temas y aspectos tratados en clase, teniendo en cuenta que las clases presenciales se anularon en el tercer trimestre. 

A pesar de las medidas de protección anunciadas, el Sindicato de Estudiantes ha criticado la celebración presencial de las pruebas de acceso a la universidad por considerar que ponen "en riesgo la salud y las vidas de más de 217.000 estudiantes en toda España". La secretaria de organización del sindicato, Marina Mata, ha reiterado su "vehemente" oposición a la selectividad tal y como está planteada y ha aprovechado para recordar que la selectividad, a su modo de ver, es una "barrera más para que los hijos de familias trabajadoras no puedan acceder a la universidad pública".