En previsión de que algún estudiante acudiera al examen de selectividad con micrófonos, auriculares u otros aparatos eléctricos que les permitieran comunicarse con el exterior -para preguntar, por ejemplo, qué es una catáfora-, los presidentes de los tribunales emplazaban este martes a los (y las) estudiantes con el pelo largo a que dejaran sus orejas al descubierto, como muestra la foto de la Universitat de Barcelona.
Sin embargo, el primer día de las Pruebas de Acceso a la Universidad (PAU) transcurrió con «total normalidad », según informó la Secretaria de Universitats e Investigació de la Generalitat. «No hemos tenido el más mínimo contratiempo ni ninguna pregunta que fuera motivo de polémica», puso como ejemplo el profesor Joan Sorribes, presidente del tribunal 319 en la UAB.
Tras las pruebas de lengua castellana y catalana (con una adaptación específica para acceder a los grados en Educación Infantil y Primaria), llegaron las primeras materias de modalidad: Análisis Musical, Economía de Empresa, Química, Literatura en castellano y Dibujo técnico.