La pensión de viudedad es una prestación económica que la Seguridad Social concede a los cónyuges o ex cónyuges de un trabajador fallecido, siempre que cumplan una serie de requisitos. Su objetivo es garantizar un nivel de vida digno a las personas que han perdido a su pareja y que, en muchos casos, se encuentran en una situación de vulnerabilidad.

Este 2024, las pensiones de viudedad han registrado una subida histórica en sus mensualidades. Las que tienen cargas familiares se han revalorizado hasta un 14%, marcando la primera vez que superan los 1.000 euros mensuales. Además, las pensiones mínimas de viudedad se equipararán progresivamente a las pensiones mínimas de jubilación. De esta manera, aumentarán entre 1.775 y 3.800 euros anuales en cuatro años. Este 2024, la cuantía pasa de los 906 euros a los 1.033 euros mensuales.

Con las revalorizaciones de 2014, algunas personas tendrán derecho a la cuantía máxima vigente para este año (3.175,04 euros al mes) en su pensión de viudedad, de ahí que en junio, mes en el que recibirán la paga extra de verano, algunas verán un aumento en sus cuentas bancarias de hasta 6.350,08 euros, dado que la paga extra se corresponde con el doble exacto de la mensualidad que se percibe.

Para quienes reciben una pensión por viudedad, otra buena noticia es que la ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma Saiz, ha señalado que el Gobierno estudiará la "posible utilización" de los años de cotización del causante para calcular la mensualidad que corresponde a la viuda o al viudo. Lo dijo en su primera comparecencia ante la comisión del Pacto de Toledo en el Congreso, apuntando a esta vía como una de las "líneas de acción" para cumplir con el mandato de las recomendaciones de "una reforma integral y gradual de la pensión de viudedad". La otra línea, añadía la ministra, pasa por garantizar la protección de las personas beneficiarias, de 65 o más años, y cuya pensión suponga su principal fuente de ingresos.