Un año de invasión de Ucrania

La guerra deja una estela de altos tipos de interés y menor crecimiento hasta 2024

El mayor encarecimiento de las hipotecas y el frenazo más intenso del PIB se concentrará sobre todo en 2023

Sede del Banco Central Europeo (BCE), en Francfort. / REUTERS / Wolfgang Rattay

Los efectos de la guerra en Ucrania pasaron factura en 2022 a familias, empresas y estados pero su estela se extenderá, al menos, a lo largo de 2023 y 2024 en forma de elevados tipos de interés que seguirán lastrando el poder adquisitivo de los hogares, la inversión y la capacidad de gasto de los presupuestos públicos. Menor crecimiento y mayor inflación es lo que cabe esperar de la economía si se compara con las expectativas que existían antes del estallido de la guerra, hace ahora un año. El empleo, pese a todo, sigue dando sorpresas positivas, tanto en España como en la zona euro y en EEUU.