Las 5 claves de los datos del paro de 2022

El 2022 echa el cierre y la resistencia del mercado laboral, en un contexto de guerra en Europa y con la mayor inflación en 40 años, ha sorprendido a más de uno. España acaba el año con su mayor nivel de empleo de toda la serie histórica y su menor nivel de desempleo desde el 2007. Unos titulares en términos absoluto incuestionables, pero que en su subsuelo no esconden varias señalas de alarma. El conjunto del año ha sido de crecimiento, si bien en la recta final se ha producido un frenazo preocupante de cara al próximo ejercicio. Los datos dejan trazas agridulces, con una reforma laboral que sigue mejorando las condiciones de contratación, si bien los efectos 'fin de mes' siguen siendo demoledores y hay varias desigualdades entre géneros y edades que persisten. El colectivo de autónomos ha frenado en seco y habrá que ver como encaja las nuevas reglas de cotización que ya han entrado en vigor. Estas son las claves de los datos de afiliación publicados este martes por los ministerios de Trabajo y Seguridad Social. Empleo: Frena a final de año, pero alcanza niveles récord Cual corredor de fondo que acumula metros a sus espaldas a máxima velocidad, España llegó al final del 2022 con la lengua fuera. Aunque con un récord de empleo en el bolsillo. Un total de 20,29 millones de trabajadores están dados de alta en la Seguridad Social, la mayor cifra de la estadística disponible. No obstante, el vigor con el que el mercado laboral empezó 2022 no ha logrado mantenerlo en la recta final, exhausto en su carrera tras sumar durante dos años consecutivos -desde el funesto estallido del covid en marzo del 2020- récord tras récord. Un dato preocupante es el desestacionalizado de diciembre, según el cual la economía española perdió afiliados por primera vez en un mes de diciembre desde 2012. El mercado laboral gana -de momento- en cantidad de ocupados -concretamente hay 471.360 ocupados más que hace un año- y también en la calidad de los mismos. El 2022 ha sido el año de la reforma laboral y esta ha dejado huella. Se firmaron en España 11,2 millones de contratos eventuales, casi seis millones menos que antes de la reforma. Por contra, se han firmado cinco millones más de contratos indefinidos, hasta un total de siete millones. Unas cifras exorbitadas si se miran con ojos de alemán o de francés, pero que reflejan el primer claro cambio de tendencia en España en décadas. Paro: Su tasa más baja desde el 2007 La eterna asignatura pendiente de España es reducir su tasa de paro, de las más altas de Europa. Un total de 2,8 millones de personas siguen queriendo trabajar y no pueden. Si bien es alta en comparación con el resto del 'Viejo Continente' es la cifra más baja en España desde el año 2007. En los últimos 12 meses, el Sepe ha recudido su número de desempleados en 268.252 personas, registrando el mejor cierre de año pese a la incertidumbre general de la última década y media. Esos buenos datos en evolución global no esconden una persistente brecha de género a nivel de desempleo que este 2022 no se ha corregido. Hay más de medio millón más de mujeres en paro que hombres, pese a que estos, en conjunto, son más numerosos en el mercado laboral. Y es que ese paulatino descenso general del desempleo beneficia a ambos colectivos, pero son los hombres los que con mayor facilidad de reenganchan al mercado laboral. El paro entre estos ha bajado un 10,5% en el último año, frente al 7,3% entre las mujeres. ¿Cómo evolucionará el empleo en 2023? Las perspectivas para el año que viene son ambivalentes y dependen del autor de las mismas. Mientras el Gobierno anticipa un crecimiento sustancial, en comparación a los periodos previos a la pandemia, otros organismos, como el Banco de España, son más conservadores y pronostican evoluciones positivas pero sustancialmente más moderadas. Este último organismo, que fue quien más recientemente revisó sus proyecciones, anticipa un crecimiento de las horas trabajadas durante el 2023 del 0,5%. Un dato que visualiza un sustancial frenazo respecto al incremento estimado del 4,1% para el 2022. En esa misma línea, el Banco de España llega a pronosticar un ligero repunte de la tasa de paro, desde el actual 12,8% al 12,9%. Más optimista es el Gobierno, que en sus presupuestos incluyó una previsión de crecimiento del empleo del 2,9% para el 2023. Un dato por encima de las previsiones de evolución del PIB y que situaría la cifra total de ocupados en los 21 millones de trabajadores; un nuevo récord histórico. Y entre medias de ambas previsiones se encuentran otras como la de la empresa de trabajo temporal Randstad, que coincide en que el empleo seguirá creciendo, aunque a un ritmo menor que el anticipado por el Ejecutivo. Según sus cálculos, dos de cada tres empresas aumentarán sus plantillas y el 2023 cerrará con 20,6 millones de ocupados y una tasa de paro del 13,2%. Frenazo en el empleo autónomo El régimen de trabajadores autónomos, que durante los dos últimos años y pese a los efectos de la pandemia había conseguido seguir creciendo en miembros, ha cerrado el 2023 con un rotundo frenazo. Hasta el punto de que hay en diciembre del 2022 solo cinco autónomos más que en diciembre del 2021, sobre un total de 3,32 millones de autoempleados. El comercio es el sector donde los trabajadores por cuenta propia más han sufrido este 2022. Hasta el punto de que se han extinguido casi 19.000 negocios de este tipo en el último año. Por contra, los autónomos dedicados a las actividades científicas (+7.064), a la sanidad (+4.531) y a la construcción (+3.999) han compensado esa pérdida. Catalunya cierra el 2022 peor que Madrid Catalunya ha cerrado un 2022 de crecimiento del empleo y descenso del paro, pese a las múltiples perturbaciones económicas derivadas de la guerra, la inflación o los efectos residuales de la pandemia. Con mejores datos que en 2019, antes de la pandemia. Las cuatro provincias catalanas sumaron a final del ejercicio 96.649 ocupados más, hasta un total de 3,6 millones de catalanes dados de alta en la Seguridad Social. Es la cifra más alta de empleo registrada hasta la fecha, pese a que la campaña de Navidad ha sido -como viene siendo habitual en los últimos años- mala para la ocupación. En la comparativa interterritorial, Catalunya queda por detrás de la otra locomotora económica de la Península: Madrid. La capital del Estado ha cerrado el 2022 con un incremento de ocupados del 3,9%, frente al 2,75% de Catalunya. No obstante, Canarias (+5,2%) y Baleares (+3,95%) han sido las comunidades autónomas con mejores resultados, impulsadas ambas por la recuperación del sector servicios y, más concretamente, de la hostelería tras el fin de las últimas restricciones covid y la reactivación del turismo internacional.

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