Europa busca creer en el coche eléctrico

  • España se sitúa a la cola del Viejo Continente donde los primeros puestos los ocupan países con un mayor impulso fiscal y social. Entre los retos, la excesiva dependencia de los microchips

¿Cuánto puedo ahorrar comprando un coche eléctrico?

Hace no tantas décadas, si la sociedad hubiera querido reunir en una imagen colectiva cómo sería el futuro de los coches, mostraría un aparato ágil, de curiosa forma, pero con una clara característica, la de volar. Sin embargo, frente a esa dosis de imaginación, ha sido otra realidad la que se ha acabado imponiendo. Porque las marcas de automoción no miran hoy al cielo, sino a cómo se impulsarán los vehículos que rodarán sobre la Tierra en los próximos años. El camino, en un momento de ineludible atención medioambiental, apunta a un coche eléctrico desarrollado primero como híbrido y luego, como puro. Y en esa batalla verde, Europa quiere jugar un papel geoestratégico que ya ha perfilado.