Renovables: entre la demonización y la necesidad

Las empresas de energía fotovoltaica se lanzan a la compra de suelo agrícola en Aragón

Las instaladoras invadirían el paisaje con placas solares que amenazan la agricultura tradicional

Ofrecen entre 1.000 y 2.000 euros por hectárea sin importar el tipo de terreno pero sí su ubicación

El complejo fotovoltaico situado en Escatrón, Chiprana y Samper. / Epi_rc_es

La lucha de La Fueva (Huesca) sigue firme. La reunión de la pasada semana de los representantes del valle con el consejero de Agricultura, Joaquín Olona, ha traído de vuelta a la actualidad el problemático caso de las placas solares, que amenazan con invadir los terrenos más variopintos de la comunidad. El afán de los promotores para el acopio de tierras genera un proceso de especulación y de indefensión para los agricultores, según explican estos al tiempo que piden que los poderes públicos eviten el fraccionamiento artificial de proyectos, realizado para evitar los debidos controles.