Industria automovilística

Ford acelera el papel de España en el coche eléctrico

La planta de Almussafes se sumará en la fabricación de modelos puros a las de Stellantis, Mercedes-Benz y, a medio plazo, Volkswagen | El camino, no obstante, deberá pasar por reforzar la competitividad y el impulso de las ventas

Trabajadores saliendo de Ford Almussafes. / Epi_rc_es

Mannheim (Alemania), 1885. Un Karl Fiedrich Benz recién entrado en la cuarentena acaba de diseñar el primer motor de combustión interna por gasolina. El hito, uno de los más significativos de la historia de la automoción, supone el primer gran paso dentro de un sector que menos de un siglo y medio después mueve billones de euros al año gracias a su extensión por todo el mundo. Hoy, sin embargo, el horizonte de los gigantes automovilísticos está lejos de aquel primer motor. La sostenibilidad alejada de los combustibles fósiles se ha convertido en el caballo de batalla del futuro de la automoción y la lucha por albergar la fabricación de los vehículos que liderarán esa ‘revolución verde’, en un objetivo clave para cualquier país o región.