Mercado de trabajo

¿Quién gana y quién pierde con la nueva reforma laboral?

  • El contenido es fruto del consenso entre patronos y centrales, lo que ha dejado una norma que persigue el equilibrio, aunque beneficia más a trabajadores que a empresas

Dos camareras de piso limpian una habitación de hotel, en Barcelona. / Ferran Nadeu

El Congreso de los Diputados votará este jueves si convalida o no el real decreto que estructura la reforma laboral pactada entre el Gobierno, la patronal y los sindicatos. El paquete de normas ya publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE) y en vigor incluye una batería de medidas que cambian parte de las reglas del juego del mercado de trabajo. Y algunas de ellas derogan parte de la reforma laboral heredada de la etapa de Mariano Rajoy. El contenido es fruto del consenso entre patronos y centrales, lo que ha dejado una norma que persigue el equilibrio entre las partes. Algunas benefician claramente a los trabajadores y otras están más diseñadas para los intereses empresariales, aunque en el balance final de la reforma los primeros suman más tantos que los segundos. Y es que la principal baza de los patronos para sumarse al acuerdo fue minimizar los daños que hubiera podido causarles una reforma más sesgada y que tocara varios pilares de la norma de Rajoy que esta no toca. Reforma, esta última, que beneficiaba claramente a los empresarios.