En concreto

Quiero ser europeo, otra vez

  • Democracia, ingreso en la UE e incorporación al euro, nos han proporcionado, no sin muchos problemas, las mejores décadas de la historia reciente de España

bandera europa / Pixabay

Tres fueron las claves del éxito de nuestra transición a la democracia: la primera, existía un proyecto de país con una mirada hacia el pasado (nunca más una dictadura, ni una confrontación civil) y otra hacia el futuro (queremos ser como el resto de países europeos en democracia y bienestar). Segunda, este proyecto era compartido por una inmensa mayoría de españoles de diferentes creencias, enfrentados en el pasado y con rivalidades de futuro. Tercera, la clase política del momento se puso al servicio del cumplimiento de este proyecto, lo que se materializó en la Constitución de 1978 (aprobada en referéndum con el 92% de votos afirmativos y una participación del 68%) y, luego, en el Tratado de Adhesión a las Comunidades Europeas (aprobado en 1985, por unanimidad de los 309 diputados presentes en el Congreso).