La Cambra de Barcelona tendrá un presupuesto de 24,3 millones de euros para este ejercicio. Según la aprobación de cuentas del pleno de la Cambra, la institución cerró el año pasado con unos beneficios operativos de 392.000 euros pero pérdidas contables de 477.000 tras haber destinado más de un millón de euros de recursos propios para apoyar empresas en crisis. La Cambra ha aprobado destinar 875.000 euros este año a proyectos de activación económica sin ningún tipo de contraprestación económica, que serán cubiertos en su mayor parte mediante fondos propios (300.000 euros).
Pese a las pérdidas contables, la institución reafirma que el balance de situación al cierre del ejercicio muestra la solidez patrimonial de la corporación con unos fondos propios de 43 millones de euros y una tesorería de nueve millones de euros.
Según el presupuesto aprobado para el 2021, el resultado operativo será de 575.000 euros, con un crecimiento de los ingresos por servicios del orden del 20%, gracias a la creación de nuevas líneas de servicios y al impulso territorial. La digitalización, la calificación profesionales de los jóvenes, la internacionalización, los proyectos europeos y la innovación son los principales focos que deben permitir este nuevo salto cualitativo en la prestación de servicios.
El presupuesto contempla la potenciación de la función consultiva y la transformación organizacional mediante el impulso de la digitalización de los procesos y servicios, y la adaptación al teletrabajo y la flexibilidad de los espacios. La corporación cerró el ejercicio 2020 con más gastos de los presupuestados, aunque las pérdidas fueron menores finalmente que las previstas en junio pasado. Los ingresos de 2020 ascendieron a 19,6 millones de euros. De esta cifra destaca la partida de 8,5 millones de euros provenientes de programas europeos (FEDER y FSE), que la Cámara ha gestionado por revertir a la economía a través del plan 'Aixeca el teu negoci', junto con los fondos aportados por la Generalitat. La Cambra asegura que destinó unos 10 millones de euros a actuaciones destinadas a paliar la crisis. La Cambra tiene en la partida del balance 'pendientes de cobro' del orden de 15 millones de euros en programas, de fondos europeos y de las
administraciones, ya ejecutados.
En las pérdidas registradas influyó el cierre de la Llotja de Mar y la caída de ingresos por alquiler del inmueble al cancelarse todos los actos empresariales comprometidos. "La situación de confinamiento vivida a lo largo del año ha supuesto un impulso de los servicios no presenciales que la Cambra pone a disposición de las empresas, como es el caso de los trámites digitales o la formación en línea", explica la institución.