El presidente de Renfe, Isaías Táboas, prevé que los precios de la Alta Velocidad Low Cost (AVLO), que comenzará a operar a principios de abril entre Barcelona y Madrid, puedan oscilar entre 10 y 60 euros. Así lo propondrá este miércoles en el consejo de administración de la compañía, según explica en sendas entrevistas en 'El País' y 'La Vanguardia este lunes.
El máximo responsable de la compañía quiere que el sistema de venta sea mediante el sistema 'revenue', como en la aviación, con un porcentaje de precios bajos para los primeros que compran. Además, ha detallado que el tiempo de viaje será el mismo que el AVE convencional y que se recortarán los gastos sustituyendo el vagón por unas máquinas de 'vending'.
Con ello, afirma, se ganará un 20% más de las plazas con los mismos costes. Además, si estos trenes recorren de media entre 500.000 y 550.000 kilómetros al año, ahora harán 700.000 y 750.000, con el fin de tenerlos menos tiempo parados y para "optimizar la inversión" .
Por último, Táboas desmiente que no se invierta en Cercanías y asegura que hasta noviembre se han destinado 300 millones de euros, entre adjudicaciones y licitaciones. "¿Se debería invertir más? Seguro, y el Ministerio ya lo ha dicho", subraya.
Más plazas
Los AVLO solo prestarán servicio de clase turista -no habrá clase preferente- lo que añade un 20% más de plazas a los actuales trenes de la serie 112, hasta sumar un total de 438 asientos por tren. Posteriormente, a medida que se vaya extendiendo el nuevo servicio, se incorporarán los nuevos trenes de la serie 106, con una capacidad aún mayor, de 581 plazas por tren.
Con la llegada de AVLO, Renfe da un golpe sobre la mesa un año antes de la apertura a la competencia en la alta velocidad española (14 de diciembre de 2020) en el corredor de Barcelona, Levante y en la línea que une Madrid con Sevilla y Málaga.
Competencia gala e italiana
Los nuevos operadores – la francesa SNCF y la italiana Trenitalia en alianza con Air Nostrum—preparan ofertas de trenes a precios asequibles, y Renfe no se quiere quedar rezagada.
"Renfe está preparada para la llegada de la competencia en España pero también para salir fuera a competir sin complejos", advirtió Ábalos sobre la intención de la compañía de explorar otros mercados.