Seis meses después de la entrada en vigor de la subida del salario mínimo interprofesional (SMI) a 900 euros, un total de 158.600 personas se han beneficiado de ella en Catalunya. Lo que equivale al 5,9% del total de asalariados que operan en este territorio. Y el esfuerzo de las empresas para cumplir con ello ha sido, de media, leve, pues la mitad de esos casi 160.000 beneficiados solo han visto aumentar su sueldo el 10%. Así lo recoge un informe de CCOO presentado este jueves y que dibuja un retrato robot sobre quién se ha visto más afectada: Mujer, migrante, joven y que trabaja en una microempresa.
Las pymes han sido las que más nóminas han tenido que modificar estos seis primeros meses para adecuarse a la nueva normativa. El 57,6% de las personas beneficiadas por la subida del SMI estaban empleadas en una compañía con menos de 50 trabajadores. Especial peso adquieren las micro empresas, con menos de cinco trabajadores, donde se concentran el 35,7% de los afectados.
El perfil de afectado por la medida coincide, como es lógico, con las capas que mayor precariedad concentran en el mercado de trabajo. Las mujeres son las más beneficiadas, pues el 6,9% de las trabajadoras catalanas lo han notado; casi dos puntos más que los hombres. Los jóvenes siguen el mismo guión, con el 15% del total de ocupados que han visto incrementada su nómina, así como los temporales (10,5%, más del doble que los indefinidos) o los extranjeros (10,6%, también más del doble que los nacidos en España).
Y el 'rey' del salario mínimo, influido también por su peso ampliamente mayoritario en la economía catalana, es el sector servicios, donde están ocupados el 79,1% de los 158.600 catalanes beneficiados por la subida a 900 euros del SMI.
Leve esfuerzo y algunas resistencias
"Nos estamos encontrando especiales dificultades para asegurarnos de que se está aplicando la subida de manera correcta en las unidades negociadoras muy débiles y que ya tenían muchas dificultades para llegar a negociar la anterior cifra del salario mínimo", ha explicado la secretaria de acción sindical de CCOO, Cristina Torre.
El informe del sindicato también constata que, pese a que casi el 6% de los empleados catalanes se han visto beneficiados por la medida, el esfuerzo exigido a las compañías para cumplir con la misma no ha sido muy elevado. Casi la mitad de los afectados solo han visto crecer su salario el 10% para llegar a esa referencia de los 900 euros. Y tan solo uno de cada cuatro ha visto crecer más su sueldo por encima del 20%.
Catalunya no ha sido una de las comunidades autónomas más afectadas por la medida, ya que si esta ha beneficiado al 5,9% de los asalariados, en la media del conjunto de España la cifra escala hasta el 7,4%. Los territorios más exigidos, por ende, con mayor volumen de trabajadores con bajos salarios, han sido Canarias (14,5%), Extremadura (12,9%) y Murcia (10,1%). En el otro lado de la balanza, el País Vasco (2,1%), Navarra (3,9%) y La Rioja (5,1%) han sido los que menos han tenido que modificar las nóminas.