El viacrucis judicial de Rato no ha concluido entrando en Soto del Real. El próximo 26 de noviembre comenzará en la Audiencia Nacional el juicio por la salida a Bolsa de Bankia. La fiscalía considea que ocultó deliberadamente la situación de la entidad y le pide, como a otros tres exaltos cargos, cinco años de prisión por estafa.
La pena sería aún más dura si las acusaciones popular y particular consiguen que se le juzgue también por falsedad contable.
Es un juicio de gran volumen, que se prolongará hasta junio de 2019. Pero no es menor la causa que sigue el Juzgado de Instrucción 31 de Madrid por supuestos blanqueo de capitales y fraude fiscal de 6,8 millones de euros.
Un informe de la Guardia Civil sostiene en ese sumario que Rato aprovechó la privatización, durante el aznarismo, de Telefónica, Endesa y Repsol para colocar amigos que le darían después "sustanciosos contratos de publicidad".