Volkswagen Navarra logró un beneficio de 55,9 millones de euros en el 2017, un 24,9% menos que el año anterior. Las ventas totales se situaron en 2.525 millones de euros (-13,2%), mientras el resultado de explotación alcanzó los 80,8 millones de euros, un 22% menos.
Las inversiones alcanzaron en el 2017 los 230 millones de euros, la cantidad más alta en los últimos 15 años. De esta cifra, 174,5 millones fueron destinados a la preparación de la planta para la producción del nuevo Volkswagen Polo, y 35,6 millones correspondieron a trabajos relativos al segundo modelo de Volkswagen Navarra, cuya fabricación empezará a finales de año.
El director de finanzas de Volkswagen Navarra, Ingo Neubert, ha explicado los resultados "por el cambio de modelo y la consiguiente reducción del volumen de fabricación". Según Neubert, el beneficio se ha reducido respecto a la cifra "extraordinariamente alta" alcanzada en el 2016, pero "se ha mantenido en el nivel medio de los últimos cinco años".