La morosidad de los créditos concedidos por los bancos, cajas y cooperativas a particulares y empresas se redujo ligeramente en octubre, del 8,32% de septiembre al 8,22%, y se situó en el nivel más bajo desde marzo del 2012. Las entidades financieras acumularon ese mes 102.946 millones de euros en préstamos que no estaban al corriente de pagos, el 1% menos, mientras que el saldo de créditos subió el 0,25%, a los 1,252 billones de euros (frente a octubre del 2016 continuaron cayendo el 1,45%).
La provisiones para cubrir las pérdidas que podrían acarrear estos préstamos morosos se situaron en 62.191 millones de euros, el 0,53% menos que en septiembre. Su peso sobre dichos créditos se situó en el 60,4%, frente al 60,1% del mes anterior.
La tasa de morosidad está ya 5,38 puntos porcentuales por debajo del máximo histórico marcado en diciembre del 2013, cuando se colocó en el 13,6%. Sin las financieras de consumo, el ratio está en el 8,42%.