CaixaBank estima que España crecerá un poco menos en el 2016

El alza del PIB, basada en el consumo y la inversión, será del 2,7% frente al 3,1% del 2015 por el menor impulso del consumo público ligado a las elecciones

Jornada comercial del Black Friday, en La Maquinista. / ALBERT BERTRAN

España crecerá el año que viene, aunque menos que en el 2015. La economía registrará un aumento del 2,7% en el 2016, frente al 3,1% del ejercicio actual, según las estimaciones de CaixaBank Research. La ligera desaceleración, que supone un incremento de cuatro décimas frente a la estimación de la misma entidad hace un año, se producirá por el menor impulso en el consumo público, que en el 2015 ha aumentado por ser una año electoral.

Al igual que  la inversión privada, el consumo seguirá siendo uno de los motores de crecimiento

El director ejecutivo de Planificación Estratégica y Estudios de CaixaBank, Jordi Gual, ha destacado que además de la inversión privada, el consumo será otro de los motores de crecimiento. Pero, a su entender, ese incremento de la demanda interna "debe ser fuerte pero con un aumento de la población ocupada", ha explicado. De hecho, la entidad estima que en el 2016, la cifra de ocupados aumentará en 400.000 personas, lo que debería ser "un factor muy importante para preservar unas tasas elevadas de crecimiento del gasto".

Los autores del estudio auguran que la tasa de paro será el año que viene del 20,3% de la población activa, frente al 22,2% del ejercicio actual. No será hasta el año siguiente, el 2017, cuando esa variable bajará del 20%, hasta situarse en el 18,9%.  

INMOBILIARIO EN EXPANSIÓN

El año que viene, el sector inmobiliario estará en fase de expansión como la ya iniciada en el 2015 y ya contribuirá en términos positivos al aumento del producto interior bruto (PIB).Según el informe mensual de la entidad correspondiente a diciembre, destaca también la fortaleza del crédito, tanto porque empresas familias han reducido su endeudamiento como poque "las entidades financieras están en mejor posición de conceder crédito". 

La inestabilidad  política apenas ha afectado a la evolución de la actividad en el cuarto trimestre

Al entender de Gual, la situación política apenas ha afectado al crecimiento. "Se preveía que la inestabilidad podía afectar al cuarto trimestre de este año y, en cambio, se crece a un ritrmo intertrimestral del 0,7% o 0,8%", ha dicho.

MÉRITOS PROPIOS

Eso, según Gual, supone que España "es vista por los agentes económicos como una democracia madura", en la que se espera que los gobiernos surjan del diálogo.

El déficit público quedará por encima del objetivo pactado con Bruselas

El informe de CaixaBank Research calcula que el déficit de las administraciones públicas quedará por encima del 4,2% del producto interior bruto (PIB) establecido por Bruselas. En concreto, acabarán el ejercicio en torno al 4,8%. Para el 2016, la entidad espera que el peso de los números rojos públicos equivalga el 3,3% del PIB. El director ejecutivo de Planificación Estratégica y Estudios de CaixaBank, Jordi Gual,  destaca que, al margen del mandato de Bruselas, "sería importante aprovechar la recuperación para avanzar en los objetivos y llegar al superávit primario (antes del pago de la deuda) en el 2016. 

En todo caso, agrega, "será esencial la estabilidad parlamentaria para poder acometer las reformas necesarias". CaixaBank Research espera que la prima de riesgo española, que pasará de una media de 121 puntos básicos en el 2015 a100 en el 2016, dependa más de sus propios méritos que de la medidas del Banco Central europeo (BCE). Y esas reformas, en su opinión, contribuirá a conseguirlo.

Uno de los elementos primordiales, según Gual, será "controlar los costes laborales unitarios frente a los de nuestros competidores". A su entender, el dinamismo en el mercado laboral no debe proceder del crecimiento del salario unitario, "sino del conjunto de la masa salarial conforme más y más trabajadores dejen las listas del paro y se incorporen al mercado laboral".

La economía española se desenvolverá en un entorno con condiciones monetarias "muy laxas en la eurozona, con liquidez abundante, tipos de interés bajos y un euro débil".