La compra de Ono por Vodafone tiene su parte negativa en cuanto a empleo, ya que los directivos de la forma británica calculan que las duplicaciones de puestos entre las dos empresas pueden rondar el 10% de la plantilla conjunta, es decir, unos 600 empleos de los 6.000 totales.

La plantilla de Vodafone España asciende a unos 3.500 empleados y la de Ono es de unos 2.500 trabajadores. El consejero delegado de Vodafone España, Antonio Coimbra, afirmó ayer que «en procesos de este tipo las redundancias suelen ser de entre el 10% y el 30%, pero, en este caso, espero que esté más cerca del 10%, porque son empresas complementarias».

Coimbra enfatizó que es «precipitado» concretar cifras y que la compañía prevé, por ahora, tener separados los negocios de fijo y móvil.