¡Qué bajón! Decía ayer Michel Mayor, el científico que descubrió el primer planeta fuera del sistema solar, que es poco realista pensar en crear colonias humanas fuera de la Tierra. Y ello a pesar de que está convencido de que hay montones de planetas habitables y de que hay vida en algunos de ellos. Tendremos que tomarnos un paracetamol para soportar el dolor de sabernos encerrados en este triste entorno.
Aunque igual a Bruselas tampoco le parece bien que nos mediquemos. «Sería paracetamol financiero», afirmó ayer con menosprecio Amadeu Altafaj -ese español que está ganando notoriedad como vocero económico de la Comisión Europea- sobre la posibilidad de que el fondo de rescate realice una compra masiva de deuda española e italiana, como apuntaban dos medios ingleses.
«Podría aliviar la tensión, el dolor, el malestar, pero no resuelve las causas que están en la base de los problemas estructurales», decía. Pero a los inversores pareció importarles. Los rumores de megarescate, pese a los desmentidos, permitieron ayer que la prima de riesgo registrase su mayor bajada desde diciembre: 35 puntos, hasta los 513 puntos básicos, con el interés del bono a 10 años en el 6,77%.
Un gran alivio que favoreció que el Ibex 35 repuntase el 1,53%, hasta los 6.796,1 puntos. El mercado también está esperanzado con el nuevo Gobierno griego, con la posibilidad de que el rescate a la banca española se aclare de una vez y con los rumores de que la FED tomará nuevas medidas. Pero cuidado: el paracetamol, en exceso, es malo para el hígado.