Apenas se llevaba un minuto del partido entre Golden State Warriors y Minnesota Timberwolves cuando irrumpió una tángana brutal en la última jornada de la NBA. Unas imágenes que ya han dado la vuelta al mundo y que acabó con Klay Thompson, Draymond Green y Jaden McDaniels expulsados. Todo ello cuando no se había anotado ni una canasta.

Thompson, de los Warriors, y McDaniels, de los Wolves, arrancaron una bronca en medio de la cancha cuando fue Rudy Gobert a separarles. En ese momento apareció Draymond Green y agarró a este último del cuello con fuerza, como si le ahogara.

El pívot francés de Minnesota, Rudy Gobert, no fue expulsado porque los árbitros interpretaron que intentó "separar" a Thompson y McDaniels y por ello no fue sancionado.

Estas expulsiones afectaron especialmente a unos Warriors que no contaban por lesión con Stephen Curry (por molestias en la rodilla) y que, de repente, vieron cómo también se caían del partido los otros cracks del equipo.

Pese a todas esas bajas, Golden State llegó con opciones al desenlace del duelo pero finalmente cayó ante unos Wolves que han empezado la temporada a un gran nivel, con un balance de 8 victorias y solo 2 derrotas.

El dominicano-estadounidense Karl-Anthony Towns fue el más destacado de los Wolves (8-2) con 33 puntos y 11 rebotes mientras que el novato Brandin Podziemski dio un paso al frente en los Warriors (6-6) con 23 puntos.