La Unión Ciclista Internacional (UCI) ha descalificado a Nairo Quintana de la última edición del Tour de Francia por dar positivo en tramadol, un analgésico de la familia de los opioides. El 1 de marzo de 2019, la UCI prohibió su uso en las competiciones de todas las disciplinas y categorías con un fin: proteger la salud y la seguridad de los deportistas ante los efectos secundarios de esta sustancia, ha recordado la asociación. ¿Qué es el tramadol, para qué se usa y qué consecuencias implica su consumo?
El tramadol calma el dolor, pero no es un analgésico cualquiera: es de la familia de los opiáceos. Como su nombre indica, se refiere a los alcaloides presentes en el opio, los cuales actúan sobre las células del sistema nervioso. En otras palabras, su acción consiste en cambiar la manera en que el cerebro y el sistema nervioso responden al dolor.
Entre los opioides hay dos categorías: menores (o débiles) y mayores, y el medicamento que tomó Quintana está en el primer grupo, como la codeína. En el segundo están la oxicodona y el fentanilo, un medicamento legal 100 veces más fuerte que la morfina y 50 veces más potente que la devastadora heroína.
Alto riesgo de adicción
Sean débiles o fuertes, los opioides comparten un efecto secundario: comportan un riesgo alto de adicción. Respecto a la potencia analgésica del tramadol, diferentes estudios dictaminan que es entre seis y 10 veces menor que la de la morfina. Aunque este fármaco este considerado como débil, guarda relación con la morfina: su comportamiento es igual.
Por eso, diferentes estudios aseguran que un consumo en dosis mayores a las terapéuticas (150 miligramos al día) se experimentan los mismos efectos que proveen los opiáceos mayores. Pese a ello, la dosis 'techo' es de 400 miligramos al día.
Caídas y otros efectos
A diferencia de otras sustancias que se prohíben porque favorecen al rendimiento de los ciclistas, el tramadol preocupa a la UCI por otros motivos. Primero, porque cree que se abusa de este opioide y, segundo, porque su efecto calmante y relajante provoca más caídas.
La Agencia Mundial Antidopaje aceptó la excepción ciclista porque, según sus estudios sobre la sustancia, más de dos terceras partes de los deportistas analizados (68%) que tomaban tramadol antes del 2019. "Es un medicamento que actúa sobre el sistema nervioso central y engendra serios problemas de concentración", afirmó la UCI en la solicitud para declararlo antirreglamentario.