Ronaldinho, inquilino del Cuadrilátero, calabozo de narcos y políticos corruptos

La sonrisa de Ronaldinho se ensombreció detrás de las rejas. El ex astro del Barcelona se quedó sin la posibilidad de cumplir la prisión preventiva en una mansión de la capital paraguaya. El juez Gustavo Amarilla rechazó la solicitud de libertad ambulatoria o arresto domiciliario solicitado por los siete defensores del exfutbolista y su hermano Roberto Assis Moreira. Los abogados habían ofrecido una casa de 11 hectáreas valorada en más de 900.000 de euros como el lugar de reclusión temporal mientras se tramita su causa.

"La fiscalía expresó su oposición. No es suficiente el monto de la propiedad que ofreció al defensor, atendiendo a la solvencia económica del exfutbolista. Además hace una semana comenzó la investigación y la causa tiene una gran magnitud por la complicidad de funcionarios públicos, empresarios". Según Amarilla, "estamos ante un hecho de expectativa de pena privativa de libertad de hasta cinco años".

El magistrado, además, consideró que si Ronaldinho abandonaba la celda de la Agrupación Especializada de la policía existía el peligro de que se fugara del país. Todo parece indicar que el campeón mundial 2002 con Brasil tendrá que acostumbrarse a los límites que impone "el Cuadrilátero", como se conoce el sector ubicado en la planta alta del edificio donde también son encerrados narcotraficantes, policías y políticos acusados de actos corruptos.

Una fuga de película

Las cárceles paraguayas están bajo una fuerte sospecha desde la cinematográfica fuga en enero del penal de Pedro Juan Caballero de Paraguay. Setenta y seis reclusos, algunos de ellos pertenecientes al grupo delictivo brasileño Primer Comando Capital (PCC), abandonaron el penal a través de un túnel mientras que otros salieron por la misma puerta.

En un universo penitenciario atravesado por el hampa pasa sus noches Ronaldinho. "Ver a un ídolo así me duele", dijo el presidente Mario Abdo Benítez. El caso estremece al Gobierno de derechas. Benítez aseguró durante una entrevista haber ordenado una investigación exhaustiva al cuestionado ministro del Interior, Euclides Acevedo. "Tenemos que saber la verdad", se quejó el mandatario.

La verdad puede traer problemas. El fiscal Federico Delfino confirmó el arresto de cuatro funcionarios de la Dirección Nacional de Aeronáutica Civil y de Migraciones. La nueva directora de esa dependencia, Ángeles Arriola, dijo que quiere saber si hubo una "orden de arriba" que facilitó la entrada al Paraguay de Ronaldinho  y su hermano con pasaportes falsificados. "Me encantaría saber por qué actuaron de esa manera. ¿Será que se asustaron?", se preguntó sobre la actitud de los funcionarios.

Dalia López, la empresaria que contrató al exjugador, se resiste a presentarse ante el juez. Se sospecha que López, con estrechos contactos con el mundo político paraguayo, tuvo un papel importante en la confección de los documentos falsos. "Las autoridades están metidas en esto hasta el cogote", dijo su abogado Marcos Estigarribia.

Negocios sin aclaración

Ronaldinho aterrizó en Asunción el pasado 4 de marzo. Alegó haber sido invitado solo para un evento benéfico y para participar  en el lanzamiento de un casino. "No obstante, unos testigos confirmaron que deseaba hacer negocios en el Paraguay y por ello estaban gestionando sus documentos", publicó el diario' ABC'.  "Aún hay preguntas abiertas en este grotesco asunto que ya ha dado la vuelta al mundo, para escarnio de los paraguayos honestos", señaló a su vez en su editorial del martes. "Cuesta creer tanta necedad, aunque el abogado Adolfo Marín haya calificado de "tonto" a su defendido Ronaldinho".