No se llevan ni dos meses de Liga y David Gallego, el técnico del Espanyol, está bajo sospecha. La derrota ante el Valladolid, cuarta en casa, colocó al entrenador blanquiazul en el foco de las críticas. "Gallego, vete ya", gritó en varias ocasiones la grada del RCDE Stadium, cansada de ver perder a su equipo, que anda en zona de descenso. "Me siento capacitado, por supuesto", ha dicho Gallego, convencido de que podrá superar la grave crisis en la que anda sumergido.

"No damos con la tecla de los resultados, pero el equipo, por juego, ha crecido. Los errores individuales no esconden el buen trabajo colectivo", ha recalcado el técnico del Espanyol. "No hay que ser alarmistas", ha subrayado Gallego.

"Se debe aceptar lo que dice la afición, pero tengo claro mi trabajo y cual es el camino. Seguiré siendo un luchador" (Gallego)

"La afición es soberana, es la que paga y se manifiesta", ha admitido el entrenador blanquiazul cuando se le ha cuestionado sobre los gritos del público en que se reclamaba su destitución. "Se debe aceptar lo que dice, pero tengo claro mi trabajo y cuál es el camino. Seguire siendo un luchador e insistiendo".