EL ESTRENO DE LOS CHARRÚAS

Un cabezazo de Giménez aúpa a Uruguay en un pésimo partido de Luis Suárez

El central del Atlético marca en el último suspiro ante un Egipto sin Salah

Luis Suárez dispara fuera en su primera ocasión clara. / REUTERS / DARREN STAPLES

Ni Mohamed Salah, reservado por Héctor Cúper por temor a la dureza uruguaya, ni Luis Suárez, que completó uno de los peores partidos de su vida. El héroe del estreno charrúa en el Mundial fue José María Giménez. Un cabezazo del bravo central del Atlético en el último suspiro acabó con la resistencia de Egipto (0-1).

La justicia llegó demasiado tarde en Ekaterimburgo, la sede más oriental del Mundial, al pie de los Urales. Si Uruguay, que no ganaba su primer partido en un Mundial desde 1970, no selló antes el triunfo fue, básicamente, por la ineficacia de Luis Suárez, que falló tres goles clarísimos cuatro años después de su lamentable mordisco a Chiellini en Brasil. Regresó con muchas ganas el azulgrana, pero con escasa fortuna.

Salah, suplente

El duelo comenzó con dos noticias importantes en la alineación de Egipto. En primer lugar, la ausencia de Salah. Su entrenador, con muchas batallas en su zurrón, jugó al despiste en la previa dejando caer que la estrella sería titular, pero al final prefirió reservarlo, consciente de la contundencia de los uruguayos. Si Sergio Ramos causó la lesión en el hombro derecho del extremo del Liverpool, GodínGiménez Cáceres no eran los mejores adversarios para una plácida reaparición.

Salah, en el banquillo de Egipto, reservado por Cúper / anne christine (afp)

Cúper también prescindió del portero Essam El Hadary, que aspira a convertirse a sus 45 años en el futbolista más longevo en la fase final de un Mundial. En los uruguayos, el maestro Tabárez se mantuvo fiel a sus ensayos y alineó el once esperado, con Cavani y Luis Suárez arriba.

Demasiada precipitación

Volvió Suárez pero su ímpetu se convirtió en un problema para su selección. El jugador del Barça exhibió su peor versión, la que muestra más de una vez en la Champions, aquella en la que destacan más la  precipitación y el corazón que la clarividencia y el acierto.

Su festival de errores comenzó en el minuto 23 cuando se quedó solo ante El Shenawy. Todo el estadio cantó gol por el efecto óptico, pero el disparo se marchó al lateral de la red. Era más fácil marcar que errar.

Suárez falla su segunda ocasión clara ante el meta egipcio / Vadim ghirda (ap)

La frustración aumentó en la primera jugada del segundo tiempo. En una ocasión similar a la primera, Suárez fue incapaz de superar al portero africano, que se convirtió en un muro infranqueable para el azulgrana. El trío de desgracias lo completó nuevamente ante el arquero. Suárez dudó y acabó tropezando (m. 72). Peor imposible.

Apoyo de Tabárez

"¿Por qué no jugó bien Suárez? Pues no lo sé. No puedo especular. PeléMaradona y otras glorias también tuvieron partidos malos. No es un pecado", respondió Tabárez al ser cuestionado por el pobre rendimiento de su estrella.  

El meta egipcio se agigantó también con una parada magistral en un disparo de Cavani (m. 82). El punta del PSG envió después una falta al palo (m. 88). La desesperación charrúa dio paso al éxtasis con el cabezazo salvador de Giménez.  

Egipto, 0; Uruguay, 1

<strong>EGIPTO:</strong> El Shenawy (8); Fathy (5), Gabr (6), Hegazy (6), Abdel Shafy (5); Elneny (6), Hamed (5) (Morsy (5), m. 49), Warda (6) (Sobhi, m. 83), Said (5), Trezeguet (6); Marwan Mohsen (4) (Kahraba (4), m. 63).