Un año y medio ha durado la aventura de Sergio González en el banquillo del Espanyol. La primera experiencia del técnico catalán en la máxima categoría concluyó este lunes de forma catastrófica para él. Ubicado en la 12ª posición, con ocho equipos por debajo y a tres puntos del descenso, el club blanquiazul despidió al técnico en busca de un cambio en un contexto revuelto a todos los niveles, desde la cúpula al campo, pasando por una afición desencantada. Constantin Galca, de 43 años y excompañero de Sergio en la plantilla blanquiazul, es el nuevo entrenador.

«Soy el hombre más feliz del mundo. Tenemos que lograr un equipo con el que se sienta identificada la gente, con buen fútbol y equilibrio. Que la afición diga: ‘¿Dónde voy hoy?’ A ver al Espanyol, a disfrutar al estadio’». El 28 de mayo del 2014 Sergio volvía a su casa28 de mayo del 2014Sergio  con este mensaje. Era el entrenador de la casa, la apuesta del director deportivo Òscar Perarnau, no tanto del presidente Joan Collet, como el mismo Sergio deslizó en su presentación. «Le doy mi agradecimiento a Joan, sabemos que le ha costado, pero le hemos convencido». Aquel día, el rostro del dirigente se torció al oír esas palabras. Ahora Sergio ya es historia en el banquillo perico tras 62 partidos (22 victorias, 14 empates, 26 derrotas).

DECISIÓN DRÁSTICA

Desde fuera cuesta entender una decisión tan drástica con el equipo en la zona media y en una semana trascendental con la vuelta de la Copa ante el Levante este martes y el duelo contra Las Palmas del sábado en la Liga. Dos rivales en casa con menor potencial que los pericos. Pero Sergio estaba en entredicho desde hacía tiempo y la segunda parte en Vigo, con una imagen lamentable ante un rival con 10, acabó de liquidarlo. El mismo sábado se produjo la primera llamada a Galca.

Collet y Perarnau se reunieron el domingo y este lunes se precipitaron los acontecimientos. Al mediodía le comunicaron a Sergio su destitución y a las 14.57 horas se hizo oficial en la web del club. El segundo entrenador Diego Ribera y el preparador físico Miquel Gomila también abandonan la entidad. «Es un día desagradable, tuve una convivencia muy positiva con el cuerpo ténico durante un año y medio. La afición disfrutó mucho el año pasado, pero ahora la dinámica no era positiva. Quereremos un cambio», valoró Perarnau. Galca fue una de las opciones analizadas por el club hace 19 meses para sutituir a Aguirre, pero el elegido al final fue Sergio.

CHEN, INFORMADO

El consenso para nombrar al nuevo técnico fue rápido. «En 24 horas la decisión estaba tomada. Galca es un estudioso del fútbol, que lo vive. Desde el minuto 1 fue nuestra primera opción». Collet, mientras, destacó el «perfil de la casa» del rumano, un aspecto en el que coincide con Sergio y Pochettino. El presidente informó del cambio a Chen Yansheng, el futuro propietario. «Le comuniqué la decisión, no se la consulté», aclaró.

El relevo llega después de sumar el equipo un triunfo en las siete últimas jornadas. No había buen rollo y la situación tenía que estallar por algún sitio. Jugadores de peso como Gerard Moreno o Víctor Sánchez habían destacado el mal juego, otros como Burgui habían mostrado su enfado con un técnico sin apoyos en el vestuario y en la grada. Galca espera revertir eso.

APUESTA OFENSIVA

«Soy un perico más, vuelvo a casa. He seguido todos los partidos y veo un potencial extraordinario», dijo en su presentación. El técnico, que apostará por el 4-2-3-1, tiene las ideas muy claras.

«Voy a darlo todo para conseguir un buen nivel. Quiero un Espanyol que trate bien el balón, que tenga la posesión, desgaste al contrario y sea intenso y agresivo», resumió el preparador, que ha firmado solo hasta final de temporada.