Un triunfo memorable

Un Barça angelical

El equipo azulgrana hace historia al ser el primer europeo que vence al campeón estadounidense

Para siempre quedará que el Regal Barça, el campeón de la Euroliga, se convirtió ayer en el primer equipo europeo en tumbar a los Lakers, todo un campeón de la NBA. Para la historia del baloncesto y para la historia del club, que ya se había convertido en pionero, hace cuatro años, cuando venció a los Sixers también en el Sant Jordi en otro amistoso. Aquello queda en anécdota ahora. La de ayer será una gesta para recordar, su Copa Intercontinental oficiosa, por mucho que los Lakers estén en pretemporada. Los grandes equipos jamás buscan excusas.

Fue un espectáculo soberbio. Hubo pasión, hubo roces, hubo tensión en bastantes acciones, tres técnicas, incluso algún conato de pelea y hasta bronca del público por el arbitraje. Si en algún momento el partido tuvo el carácter de amistoso, desapareció en cuanto el balón empezó a rodar. De dos equipos campeones no se podía esperar otra actitud. Así que el Sant Jordi no tardó en tomar partido por sus colores, por muchas camisetas de los Lakers que hubiera en las gradas. Y explotó de felicidad al final, consciente de que Navarro (25 puntos, 6 asistencias), Mickeal (26 puntos), Morris (12) y compañía estaban agrandando su leyenda.

No puede decirse que los Lakers regalaran nada. Apenas reservaron a Gasol (jugó 35 minutos). Exprimieron los minutos de Bryant (24) y explotaron a todas sus figuras, a excepción del lesionado Bynum. Se entregaron para dejar a salvo el orgullo, que salió ligeramente tocado.

DURA PUGNA / Por si existía alguna duda sobre el perfil competitivo del partido, el azulgrana Mickeal y Artest se encargaron de despejarla cuando solo se llevaba un minuto, enzarzándose en un intercambio de golpes del que el azulgrana salió peor parado. Recibió una técnica.

Esa acción y varias decisiones arbitrales discutibles a favor de los Lakers solo hicieron que calentar el ambiente sobre la pista muy por encima de lo que podía esperarse del amistoso. Los jugadores del Barça, que salieron con un exceso de responsabilidad, lo acusaron en los primeros minutos, en los que Bryant y, sobre todo, Pau Gasol (12 puntos en el primer cuarto) dictaron cátedra.

No fue hasta que Navarro se enchufó que el Barça empezó a tomarle el pulso al partido. El efecto contagio se notó y mucho más cuando Bryant, a los nueve minutos, se fue al banquillo, lo que le dio al equipo de Xavi Pascual la delantera por vez primera (21-20) y le permitió marcharse al descanso con ventaja (45-44).

Jackson dejó claro que se lo tomaba en serio cuando recurrió, de nuevo, al quinteto titular, con el que los Lakers llegaron a escaparse (49-60) en el tercer cuarto. Pero tres triples casi consecutivos de Morris y Lakovic hicieron que todo volviera a empezar (63-64) y que el partido fuera subiendo de tono hasta un último cuarto soberbio, en el que cada canasta del Barça le seguía una explosión de felicidad. Eso sucedió con un triple de Navarro, que volvió a avanzar a los azulgranas, y sobre todo con los de Morris y Mickeal (84-78) a solo dos minutos. Esos tiros abrieron el camino del triunfo, aunque aún lo tuvieron que sudar los barcelonistas desde los tiros libres hasta que Mickeal acabó de sentenciar con cuatro casi consecutivos. La rúbrica a una gesta para recordar.