Julián Muñoz: 10 cosas que hay que saber del 'ex' de Isabel Pantoja que protagoniza nueva docuserie

AMORES DE BARRA De profesión camarero, a principios de los años 70 conoció en un pub de San Martín de Valdeiglesias a Maite Zaldívar: una joven camarera con una niña pequeña, Eloísa, fruto de un matrimonio anterior. Tras casarse en 1974, regentaron el bar de copas Macay. Endeudados hasta las cejas, en 1983 se marcharon a Marbella. LA FAMILIA CRECE Poco después de abrir un modesto bar, inauguraron el restaurante Maite Puerto en Puerto Banús. Como el negocio fracasó, y coincidió con el nacimiento de Elia, su primera hija en común, no le quedó otra que trabajar (por cuenta ajena) de encargado del Petit Paris, un popular local de la zona. AMISTADES PELIGROSAS Justo allí coincidió con el alcalde de la ciudad Jesús Gil, quien le ofreció un hueco en la lista del Grupo Independiente Liberal (GIL) para las municipales de 1991. Pese a estar afiliado al PSOE, cambió de chaqueta. BRAGUETAZO POLÍTICO Su ascenso en el organigrama gilista fue meteórico: de mero concejal de Fiestas pasó a ser teniente de alcalde de Nueva Andalucía. Dado que Gil fue inhabilitado por su implicación en el ‘caso Camisetas’, el 2 mayo de 2002 asumió las funciones de alcalde. Pronto colocó en el consistorio a su esposa y a otros familiares. SE ME ENAMORA EL ALMA Isabel Pantoja entró en juego en enero de 2003, en el marco de la Feria Internacional de Turismo. Oficialmente la tonadillera había sido contratada como imagen promocional de Marbella, pero aquello marcó el inicio de una controvertida relación amorosa. HUMILLACIÓN PÚBLICA Por más que durante semanas lo llevaron en secreto, en marzo de 2003 la parejita realizó el camino del Rocío. La prensa ahí presente no daba crédito. Zaldívar, aún menos: el 1 de mayo llamó al programa ‘Bravo por la tarde’, de Canal Sur, para confirmar que Muñoz había abandonado el domicilio familiar. LA ERÓTICA DEL PODER Aquella deslealtad no le pasó factura en las urnas. De hecho, el 25 de mayo de 2003 ganó las elecciones municipales por mayoría absoluta. Pantoja, rodeada de lujos, abandonó los escenarios para ejercer de dueña y señora de Marbella. SE ACABÓ LA FIESTA Una moción de censura, impulsada por siete tránsfugas del GIL, le puso de patitas en la calle el 13 de agosto de 2003. Si bien la sombra de la corrupción ya venía coleando en el partido, Zaldívar lo confirmó el 29 de enero de 2004 en el espacio de Telecinco ‘A tu lado’. Para sorpresa de todos, relató cómo su exmarido solía volver a casa con bolsas de basura llenas de billetes provenientes de comisiones de obras. EL 'CASO MALAYA' Del 19 julio de 2006 al 17 de octubre de 2008 ingresó en prisión preventiva. Una vez celebrado el juicio, el 16 de abril de 2013, la Audiencia Nacional de Málaga le condenó a siete años de prisión por blanqueo de capitales continuado y cohecho pasivo. Ese mismo octubre sumó dos años más entre rejas y 16 de inhabilitación por fraude y prevaricación. En mayo de 2016, le concedieron el tercer grado después de alegar pluripatologías graves e incurables, aunque hasta el pasado verano no logró la libertad condicional. Por muy mal que afirme estar, sigue fumando como un carretero. LA HORA (MEDIÁTICA) DE LA VERDAD Ni Pantoja ni Zaldívar esquivaron la cárcel por blanqueo de capitales. Ahora bien, lo que ninguna de ellas esperaba a estas alturas es que la docuserie ‘No es la hora de la venganza, es la hora de la verdad’ rescataría sus fantasmas del pasado. A falta de que Rocío Carrasco vuelva a Telecinco, Paolo Vasile se ha marcado un buen tanto.

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