Cornellà (Barcelonès) inicia un proyecto educativo pionero con diez escuelas de de la ciudad que se fundamenta en la plantación de la 'col papelina' junto con abuelos y abuelas que tienen un huerto municipal en el municipio.
En las escuelas Anselm Clavé y Mediterrània ya hicieron una prueba piloto el curso anterior y, este año, se han sumado otros centros de Cornellà: Areny, Antoni Gaudí, Jacint Verdaguer, Dolors Almeda, Betània y los institutos Francesc Macià, Esteve Terradas i Illay Miquel Martí i Pol.
Este proyecto tiene como objetivo “promover y desarrollar la educación alimentaria y ambiental, introduciendo la sensorialidad y el gusto como punto de partida, persiguiendo los valores de proximidad, sostenibilidad y el aprovechamiento alimenticio”, explican desde el Ayuntamiento de Cornellà.
El pasado 19 de octubre, a las 10 horas, en el huerto urbano Josep Pidelaserra Llach, se encontraron los 25 alumnos de los 11 centros educativos para recibir la semilla de la col papelina y con la guía del abuelo de cada escuela plantarla.
Del huerto a las cocinas
Las once escuelas entregarán una parte de sus semillas a los abuelos y abuelas de los huertos urbanos de Cornellà. El resto irá al huerto de la escuela y a los campesinos que colaboran en el proyecto que forman parte del Parc Agrari del Baix Llobregat.
Las coles que nacerán gracias a los campesinos y “revalorizadas por los niños,” serán cocinadas por cocineros de renombre, como: Valentí Mongay, Ada Parellada, Sergi de Meià, Alberto Mendiola, Marc Esteve, Xavier Llanos, Jose Manuel Parrado, Eva Davo y Diego Borja, Pep Salsetes, entre otros.
En el proyecto también participa un centro de Sant Joan Despí, la escuela Sant Francesc de Assís, y cuenta con la colaboración del Convivium Slow Food Garraf-Penedès.
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