Un total de 17 ayuntamientos catalanes han aprobado una moción para instar al Departament d'Ensenyament a paralizar el nuevo decreto de comedores escolaresque pretende poner en marcha este curso y para abrir un periodo de diálogo.
Cornellà, Barcelona, Badalona, Girona, Igualada o Granollers son algunos de los consistorios que, prácticamente por unanimidad, han mostrado su apoyo a este texto, que pretende abrir un debate sobre el marco que debe regular el servicio de comedor y el espacio de mediodía de las escuelas catalanas.
Sólo tres administraciones, la Diputació de Barcelona y los ayuntamientos de Vila-Seca y Torrelló, se han mostrado contrarios a la aprobación de la moción, que ya está registrada o en vías de registro en una decena de municipios más.
La Coordinadora SOS Menjadors Escolars, una de las impulsoras de la propuesta, reclama equiparar tiempo de comedor al tiempo educativo y conseguir que las familias puedan continuar gestionando el servicio de comedor como lo han hecho hasta ahora.
La coordinadora, que engloba a familias, sindicatos de estudiantes y docentes y otras entidades del mundo educativo, se reunirá en asamblea en 15 días para decidir qué acciones de movilización ciudadana llevará a cabo para paralizar el decreto.