medicina regenerativa

Manuel Serrano traslada de Madrid a Barcelona sus investigaciones sobre células madre

El prestigioso científico ficha por el Institut de Recerca Biomèdica

Sus trabajos se centran en la reprogramación de células dañadas para que vuelvan a funcionar

Manuel Serrano, en su nuevo laboratorio del IRB Barcelona, en el Parc Científic de Barcelona. / RICARD FADRIQUE

Manuel Serrano, autoridad mundial en la reparación de tejidos y cáncer, ha dejado el Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO), en Madrid, donde dirigía desde el 2003 su Grupo de Supresión Tumoral, para fichar por el Institut de Recerca Biomèdica de Barcelona (IRB Barcelona). 

Serrano (Madrid, 1964), conocido internacionalmente porque en el 2013 consiguió por primera vez reprogramar células diferenciadas -redirigirlas al estado anterior pluripotencial- en el interior de un organismo vivo, ampliará sus estudios sobre enfermedades como la fibrosis pulmonar, la fibrosis cardiaca y la diabetes, según ha avanzado esta mañana al presentar sus objetivos en Barcelona. En el caso de la diabetes, ha puesto por ejemplo, el páncreas ha perdido la capacidad de producir insulina, "y el objetivo es reprogramar células para que la generen de nuevo".

El investigador madrileño se muda con todo su equipo, una quincena de personas, incluida la investigadora sénior Cristina Pantoja, y mantiene las ayudas de las que se beneficia actualmente, particularmente la otorgada por el Consejo Europeo de Investigación (dos Advanced Grants consecutivos). También se traslada con sus ratones de experimentación y parte de los materiales. Su nuevo laboratorio, que se llamará de Plasticidad Celular y Enfermedad, ocupa unos 200 metros cuadrados. 

Serrano se ha incorporado al IRB Barcelona gracias a la implicación del programa ICREA de la Generalitat, que le paga el contrato como profesor de investigación, y la Fundación Bancaria La Caixa, que impulsará económicamente las estudios que se desarrrollen en su nuevo laboratorio. Es lo que el director del IRB Barcelona, Joan Guinovart, ha calificado como una "conjunción de factores con recursos públicos y privados". "Cuando se ficha a un 'crack' es para celebrarlo", ha añadido Guinovart. Serrano, por su parte, ha explicado que también le ha ayudado a decidirse el "contexto multidisciplinario" del instituto, con el que ya había colaborado previamente.

Serrano, que antes del CNIO trabajó en el Centro Nacional de Biotecnología, también en Madrid, y en el Cold Spring Harbor Laboratory, en EEUU, ha explicado que uno de sus objetivos es analizar "las respuestas que nos protegen de los daños externos pero que a veces pueden producir enfermedades como el cáncer". El investigador empezó su carrera muy centrado en el cáncer, pero a lo largo de los años ha ampliado su campo hacia otros ámbitos, aunque siempre con el denominador común de la acumulación de células dañadas.

En la senda de los factores de Yamanaka

Parte del grupo está utilizando estos ratones para crear células madre en el páncreas, otros están trabajando en el hígado, otros en el corazón", añade Serrano. Sin embargo, admite que de momento solo lo están logrando de una manera "artificial" (con ratones modificados genéticamente) y que el objetivo “es hacerlo con fármacos". "En los últimos años se han descubierto fármacos que imitan a estos factores de reprogramación de Yamanaka". Aunque "no es una imitación perfecta", hacen algo parecido. “Tenemos interés en esto para inyectarlo en un animal y ver si así se puede aumentar su reparación", concluye.