De mayor querría ser como los belgas

Tourmalet por Sergi López Egea

De mayor querría ser como los belgas. No hay país en el mundo mundial donde el ciclismo despierte tantas y tantas pasiones. Tantas, hasta el punto de que basta hacer el recorrido o parte de él de una etapa de la Vuelta para sentir hasta cierto aroma de Tour con las autocaravanas con matrículas belgas, flamencos por supuesto, que están recorriendo las carreteras españolas siguiendo a Remco Evenepoel. Exhiben el León de Flandes, colocan la bandera de Bélgica y se pasan el día en la cuneta esperando que el hijo que todos querrían tener, el altivo Remco, pase junto a ellos para sentir orgullo de un símbolo de nación. Son 20 segundos, como máximo, pero les merece la pena.