La patalogía del británico

Froome y los gusanos criminales

  • La estrella del Israel corrió todo el año afectado por una enfermedad intestinal provocada por parásitos que se denomina esquistosiomasis y que mata a 200.000 personas al año en el mundo.

  • El cuatro veces ganador del Tour se quedaba sin fuerzas y la dolencia fue la razón por la que acabó la ronda francesa a más de cuatro horas de Pogacar en un anónima 133ª posición.

Chris Froome, con un grupo de niños, en su reciente visita a Israel. / ISRAEL START UP NATION

No era normal que Chris Froome, con cuatro Tours, dos Vueltas y un Giro a la espalda, llegara a París, el 18 de julio, a 4 horas y 12 minutos de Tadej Pogacar en un anónimo 133 puesto de la general. Y tampoco que no se le hubiera visto ni en una escapada; nunca en las posiciones distinguidas del pelotón. Se le apunta como mejor resultado la 72ª plaza conseguida en la 15ª etapa, la que llegó a Andorra.