Por la sonrisa de un niño vale la pena que el abuelo pase horas junto a las vallas. Que se lleve al chaval a primera hora, que todavía no hay colegio y que vea el paso de los ciclistas, que pida una gorra, la eterna petición. ¡Pero si los ciclistas hace años que no utilizan gorras! Los más viejos del lugar se acuerdan de esas gorritas que los corredores guardaban en los bolsillos de su ‘maillot’, esa gorrita que se colocaban cuando achuchaba el calor con la visera hacia arriba para que les permitiera ver la carretera sin riesgo. Eran tiempos en los que pocos llevaban gafas de sol y se comían todos los insectos con los ojos. Era una época en la que las marcas comerciales no habían invadido el pelotón; todos llevaban las mismas zapatillas, negras, de cuero y con agujeritos en los laterales para que el pie pudiera transpirar sin excesivos problemas.
El Tourmalet
Por la sonrisa de un niño...
Un chaval sonríe junto a las vallas cogido de la mano de su abuelo
Fabio Jakobsen, en el podio de salida de Laredo. /
Lo más visto
- Las jugadoras del Barça se tuvieron que poner ellas mismas las medallas de campeonas
- Una madre y una hija farmacéuticas y un directivo de una empresa química, las víctimas catalanas del ataque terrorista en Afganistán
- Qué está pasando con el atún en lata y por qué recomiendan reducir el consumo
- El día que Elena Schröeder, la turista asesinada en Afganistán, salvó la vida a un hombre en la estación de Sants
- Junts pide suspender los resultados del 12M y repetir el voto exterior por "graves irregularidades"